Experiencia 2. Fajardo + Trilitrate
José Antonio Fajardo procede de Fuerteventura y reside en Las Palmas de Gran Canaria. Desde que en 2009 se embarcara por primera vez en una gira por la península, su carrera no ha hecho más que madurar hacia lo intransferible; proyectada a lo largo de varios sencillos y splits, un EP y tres álbumes el último de los cuales, ‘Intuición’, es de 2021.
Fajardo ha desarrollado una dicción y un (no) control de su propia voz fuera de todo alcance comparativo. El majorero lo ha dejado todo al margen y es capaz de embargar su propio cuerpo, de disponer la palabra al servicio de unas canciones que persiguen verdad por todas partes. Desde la visceralidad hasta la delicadeza más jonda, la voz de Fajardo enfunda su propia estampa compositiva de forma hermosa y necesaria. Como cauce para el arroyo, las piezas viven de otras mitades complementarias.
Dichas tablas aplican en igual medida al acuñe compositivo, con un discurrir métrico que resulta tan preciso como natural, y unas estructuras en las que muestra y esconde según demande el discurso. Tensión y dulzura, suspense y reposo en canciones tan complejas en lo armónico como sencillas para la percepción del oyente (difícil empresa). Aunque, si bien medida y austeridad puedan funcionar como antesala formal, llegar a dar con el contenido es otra cosa… Ahí se transluce toda una pátina de emociones. Un arco iris que redime solemnidad, que se difunde desde la sinceridad y que, poco a poco, va conformando formas estéticas esenciales.
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Trilitrate es un proyecto audiovisual que integra la diversidad sonora de un trío acústico unido a la videocreación en tiempo real de una artista multimedia. La banda somete cada nota a un riguroso proceso de destilación, disolución y combinación de sus influencias, desdibujando las líneas existentes entre el clásico, la música étnica, la contemporánea, la improvisación libre, el jazz, el hardcore… En este nuevo y apasionante trabajo se sumergen en timbres tan alejados al mundo acústico como la electrónica o el black metal sin abandonar sus herramientas analógicas. Visitan geografías musicales distantes como la africana o la otomana y traspasan la experiencia barroca e impresionista al siglo XXI; intrépidos e inquebrantables a la búsqueda de nuevas sonoridades, alcanzando fronteras jamás atravesadas en este paso de gigante de la agrupación.